Es
posible que seamos unas extrañas y efímeras manchas conscientes en un
desierto cósmico de insensibilidad: los únicos testigos de las
maravillas del Universo. También es posible que vivamos en un mar
universal de conciencia, rodeados de éxtasis y conflictos susceptibles a
nuestra influencia. Como los seres sensibles que somos, las dos
posibilidades deben preocuparnos.
–Timo Hannay