GIRO ESTELAR
Charles Wright
Nada es tan reservado como la forma de las estrellas,
se quitan sus vendas y miran fijamente hacia fuera,
hacia la noche,
esa oscura sala de ensayos,
y susurran sus pequeñas canciones,
aquellas de alfas y betas, las del gran disparo.
Nada es tan temeroso de la pistola,
las piezas inválidas, rotas
a la deriva y sin raíz, alzándose y cayendo, siempre
más hondo en la oscuridad.
Cada noche nos dan su espectáculo mudo, cada noche nos
delumbran
con su mensaje y su melodía,
selladas con escarcha, nuestras compañeras vigilantes.